Cuando hacemos una comida un poco especial, nos gusta preparar algún aperitivo diferente y hay algunos que les vamos dando vueltas para ver cómo los preparamos y cómo puede quedar su presentación. En casa los profiteroles forman parte de los postres de las comidas familiares, es un clásico de domingo y se alternan con los tortellets. Pero darle una vuelta y convertirlo en un entrante tenía su gracia.
Nos gusta muchísimo el queso, y por este motivo pensamos que podíamos juntar una crema de queso con algo de fruta y este es el resultado unos profiteroles con gorgonzola y mango:
Que ingredientes necesitamos:
125 grs. de agua
85 grs. de mantequilla
125 grs. de harina tamizada
4 huevos
sal una pizca
50 grs. de crema de queso natural
100 grs. de gorgonzola
50 cc de crema de leche
medio mango ó una pera
2 hojas de gelatina
Cómo lo preparamos:
Empezamos preparando los profiteroles, que podemos hacerlo con antelación, de las cantidades nos van a salir unos 50 aprox., depende del tamaño que nos gusten. Yo los hago y tras hacer unos cuantos para acompañar el café con profiteroles de crema, nata o trufa el resto los congelo en una bandeja que queden separados y posteriormente cuando están congelados, los llevo a una bolsa que es más fácil de guardar, y vamos sacando a gusto.
Preparamos el horno a 180º o 190º
Por tanto ponemos un una cacerola, el agua, la mantequilla y la sal. Lo llevamos a ebullición y sacamos del fuego. Añadimos la harina de golpe y mezclamos bien hasta que se haga una bola, lo llevamos al fuego y lo mantenemos moviéndolo durante unos minutos, hasta que la masa se separa perfectamente de las paredes. Retiramos y dejamos que se entibia.
A la masa, añadimos los huevos de uno en uno, hasta que no está bien integrado no añadimos el siguiente, acabados los huevos, lo movemos con fuerza para que quede cremoso y lo ponemos en una manga pastelera para hacer los montoncitos.
En un papel de horno, vamos haciendo montoncitos un poco separados y yo os aconsejo que no sean demasiado grandes.
Ponemos al horno, durante unos 15 minutos, como siempre ir vigilando el color que toman para que queden dorados, no tostados.
Dejamos enfriar y ya podemos empezar mientras a preparar la crema de gorgonzola.
En un recipiente ponemos a hidratar las hojas de gelatina.
En un bol colocamos la crema de queso, el gorgonzola y la mitad de la crema de leche, el resto de la crema de leche lo reservamos.
Lo batimos todo junto, hasta conseguir una consistencia de crema.
La crema que hemos reservado, la calentamos ligeramente en el microondas o al fuego, el objetivo es deshacer la gelatina. Por tanto a la que alcanza un ligero calor, escurrimos bien las hojas de gelatina del agua y las añadimos, si está en el punto de calor, de inmediato desaparecen.
Esta crema se la añadimos a crema de queso que hemos batido, mezclamos todo correctamente y antes de poner en manga, la pasamos por el colador para que quede bien fina y no tenga ningún tipo de grumo.
La ponemos en manga con boquilla rizada o lisa como nos guste y dejamos un par de horas a la nevera para que se endurezca ligeramente y ya podemos rellenar los profiteroles. completamos con trocitos de mango o si lo preferís con trocitos de pera, ambas frutas quedan muy buenas, la pera le da un punto crujiente y el mango contrarresta el dulzor con el gorgonzola.
Espero que os guste y si también sois amantes del queso os recomendamos estos aperitivos que también fueron un acierto. Mousse de queso feta
